Edición extraordinaria “La Represión franquista en Castilla la Mancha”
http://www.memoria-antifranquista.com/webvella/biblio/MAF17-cast.pdf
Hace unos años, tras una reunión en el ayuntamiento de Alcázar de San Juan sobre la rehabilitación del monumento a los casi cuatrocientos republicanos fusilados en la fosa común del cementerio, el entonces concejal de IU en Argamasilla de Alba, José Trujillo, nos informó de la existencia de un documento único: las notas manuscritas de un preso condenado a muerte en la cárcel habilitada en el convento de Santa Clara de Alcázar de San Juan, en los años 1939 y 1940. Tiempo después, José me proporcionó una copia de dichas notas, que procedí a digitalizar y transcribir.
Pienso que este es un documento excepcional porque no se trata sencillamente, como otros muchos casos, de las memorias de un preso redactadas años después de su excarcelación, sino de 35 notas de cuaderno escritas a lápiz, 22 de ellas a doble cara, que Vicente Serrano Zarco (vecino de Argamasilla y militante del Partido Comunista de España) consiguió sacar de la cárcel, escondidas entre la ropa que su mujer, Petra, recogía periódicamente para lavar.
Vicente narra en ellas las condiciones de su encarcelamiento; las sucesivas fases de esperanza y abatimiento que padecían los presos conforme se indultaba o fusilaba a vecinos, amigos, compañeros de consejo de guerra. Pero sobre todo pretende dejar constancia probatoria de los asesinatos que se cometían, registrando en listados los nombres de las víctimas y las fechas de su fusilamiento.
Finalmente, a Vicente Serrano, que había sido concejal de Argamasilla durante la guerra, la pena de muerte le fue conmutada por la de prisión.
En las primeras notas, escribe sobre las torturas y malos tratos padecidos y la arbitrariedad de la “justicia” franquista.
(…) y después me propinaron buenos palos con la verga, que de muestra la tenían encima de la mesa, esto fue porque no decía todo lo que ellos querían, y más cuando me negué a firmar la declaración la cual firmé por temor a que me siguieran pegando aquellas fieras
Porque han encerrado a quien han querido ellos, han soltado a quienes ellos han querido, han informado mal y bien de quien bien a ellos les ha parecido o más graciosos. Han fusilado a quien a ellos les ha pasado por las narices, han salido para años y han levantado la pena de muerte a quien ellos les ha venido en gana.
Y tu padre tan inocentemente como va a morir, pero me llevo el orgullo que sólo muero por la REPÚBLICA, de la cual en mi tumba nacerán flores de ella.
Vosotros todos, y por todas partes que vayáis, nunca bajéis la cabeza por mí, tened el orgullo de llevarla muy alta, y mirad a todo el mundo y tened la seguridad que por mí nunca os avergoncéis en parte alguna.
Y si lo hicieran, con toda seguridad y energías podéis salir en mi defensa.
VIVA LA REPÚBLICA. VIVA LA LIBERTAD
Prisión de Partido 17-12-40. Vicente Serrano
Sacar las notas fuera de la cárcel suponía para ambos, Petra y Vicente, correr un enorme peligro, pudiendo acarrear la detención de ella y el empeoramiento de la situación carcelaria de su marido.
(…) así que la vez que traigas el bolso procura hacerlo lo mejor posible, a mí me parece que por el desgarrón que tiene junto al culo, por dentro, en un pico, debieras ponerle una pequeña pieza especia de bolsa, para en ese sitio colocarlas. Ese ¿? es el de esparto, ya sabes el sitio
Las esquelas me las mandas en los sitios de costumbre, porque donde tú querías, fíjate y verás cómo está descosido, porque al pasar la ropa han mirado en el tarjetón.
Paco, con orinas y una pluma que no esté de tinta puede escribirme y contarme algo, pero no lo cargues mucho, o con ácido de limón, pero ya sabes cómo yo lo hago y me cuentas algo del asunto internacional, y de otras cosas, pero con mucha vista.
Cuidado con dar esto a la publicidad de nadie, porque nos costaría muy caro.
A pesar del riesgo, las notas de Vicente muestran una permanente preocupación por asegurarse de que todas las comunicaciones han llegado a su destino.
Paco: cuando me escribas me dices si habéis recibido todas las notas que he mandado, este es, desde que el infortunado Tomás falta. Me lo dices de esta manera: "padre, las judías están grandes". Y si no las habéis recibido todas, me dices: "las judías valen poco". Pues sólo he mandado en los cestos, y cuando mandé en los pantalones, esto es con el solo objeto de saber si obran todas en vuestro poder.
Resultan muy emotivos algunos comentarios de Vicente sobre su situación procesal, o preocupándose por el estado de la familia y de los amigos en el exterior.
Paco, te mando cinco cigarros, le das uno a Tío José Vicente, que se lo fume como recuerdo mío. El cesto me lo pasaron sin tarjetón, dime si es que no traía o es que ponía algo en él. Cuando vengáis decidme
Petra, (…) En la chaqueta, en la solapa y más abajo van dos alfileres. Te lo advierto por si lavas no te pinches.
Incluso uno de los documentos más singulares contiene la letra de un “Cara al Sol carcelario”, terminado con “Los mandamientos de Negrín”, y las consignas “Viva la República de trabajadores-Arriba el Partido Proletario-Uníos Hermanos Proletarios”.
Varias de las notas denuncian la situación en la que viven los presos. Vicente se disculpa por escribir sobre ello preocupando a la familia, pero argumenta la importancia de dejar constancia escrita de los padecimientos sufridos.
Petra: esta gente nos va a matar de hambre. Ya llevamos veinte días sin darnos pan, y cuando nos da, cuatrocientos gramos para cuatro. Y el día que dan es jueves o domingo, para que lo vean nuestras familias, que es cuando traen algo si pueden.
Petra, el motivo de pedirte los tostones es porque llevamos quince días sin darnos ni pizca de pan, y el rancho sólo es zanahoria cocida, y la noche un jurel y algunas veces uno para dos. No quisiera deciros estas cosas porque no me parece bien sacrificaros, pero quiero que todo los sepáis para alguna ocasión.
Que con motivo del día de Ntrª Srª de la Merced, Patrona de las Prisiones, nos dieron rancho extraordinario (…)Y también dejaron pasar a muchos niños y niñas, y estuvieron con sus padres y tíos desde las 11 de la mañana hasta las 3 de la tarde; esto lo ha hecho los días 24, 25 y 26. Pero nos hizo a todos una impresión muy grande este cuadro tan desolador: ver a las criaturas tan demacradas y vestidas de harapos, aunque no dudamos que sus madres les pusieron todo lo mejor que tenían; también contemplábamos aquellas caras de hambre y de miseria, y aquellos cutis tan ennegrecidos.
Estas son las buenas obras del FASCISMO: también comieron del rancho que comimos nosotros, el cual decía que les estaba muy bueno. También el Director les repartió monedas de diez céntimos y se pusieron muy contentos.
También los dos meses que estuvieron sin dejar de pasar comidas desde la calle: nos daban de comer arroz con jureles revueltos con raspas y todos, y por la tarde acelgas cocidas, y de que no había de esto, sardinas saladas sin pan.
Y ahora para cenar sardinas (¿¿??) y mal, y de que no jureles y besugos, y muchas veces hay que tirarlos porque huelen que apestan, y rancho muy poco. Con decirte hambre negra y mucho miedo.
Las anchuras que tenemos son un patio de cinco metros y para dormir en una chabola con siete bovedillas para once, y de que no, para doce.
Trece de las notas de Vicente incluyen listas de los antifascistas fusilados en la cárcel de Alcázar de San Juan. Porque el objetivo explícito de los papeles es servir como testimonio de los crímenes cometidos por los franquistas, presumiblemente preocupado Vicente por la posibilidad de que éstos ocultasen o destruyesen las pruebas. Todo ello con las esperanzas puestas en un posible cambio de las circunstancias internacionales, que pudiera tener consecuencias en la situación política española.
Enhorabuena: todos han ido a morir sonrientes y enérgicos, dando ánimos a los camaradas que en la mazmorra quedaban para lo mismo. Todos se despedían con un ¡Viva la República!, y pidiendo venganza.
A los 13 meses de una paz honrosa. El día 26 de abril fueron fusilados 6 buenos compañeros de Alcázar. En estos cierra la suma de doscientos.
Compañeros todos, que vuestras muertes sean vengadas, esto lo han pedido todos, y nosotros los que faltamos también lo exigimos.
Gloria a los mártires de la Libertad. Viva la República,
Vuestro compañero Vicente Serrano. Alcázar de San Juan, 30-04-1940
Recordad nuestras vidas como héroes que lo fuimos todos.
Noches de tragedia para los mártires de la libertad; y de (¿¿??) para los criminales fascistas.
Nombres y apellidos de los fusilados. Mes y fecha desde el día 14 de marzo del 1940 al día ¿¿?? Septiembre del mismo año. En la Prisión de Partido de Alcázar de San Juan. NOCHES TRÁGICAS. (Añade una lista de 105 nombres, con la fecha del asesinato, agrupados por las poblaciones de origen: Alcázar de San Juan, Argamasilla, Socuéllamos y Tomelloso).
Prisión de Partido, 14.XI.40
A los veinte meses de Paz Honrosa, los que dicen ser católicos han fusilado en esta localidad a Trescientos Sesenta y Uno.
Todavía quedan (¿¿??). ¡ MUERTE ! algunos, más de cien y los que después vengan, pues esta gente cada vez está más sedienta de carne humana. (…)
Un abrazo a todos mis amigos, compañeros y familiares, y para vosotros de tu Vicente
Muchos de los textos expresan la necesidad imperiosa de impedir la impunidad de los crímenes franquistas, de combatir el olvido.
Conserva bien todas las notas que mando
Incluso finaliza así Vicente un poema dirigido a su familia:
(…)
Los papeles no se rompen
y se archivan con esmero
nunca podrán escapar
los que tanto daño hicieron
Hojas del árbol caídas
semillas del viento son
no dejéis de recogerlas
cuando llegue la ocasión
Nota en el lateral: Desde mi prisión: Alcázar de San Juan, 4-6-40. Vicente Serrano
Casi 400 vecinos del partido judicial de Alcázar de San Juan fueron fusilados y yacen en las dos fosas comunes del cementerio de esta localidad. Siempre tras una farsa de consejo de guerra llevada a cabo por un tribunal militar ilegalmente constituido; en aplicación de leyes promulgadas por un poder golpista, ilegítimo e ilegal; sin las mínimas garantías procesales; sin derecho de apelación a una instancia jurídica superior independiente. Unas sentencias sustentadas en denuncias en muchos casos anónimas. Sin derecho efectivo a la defensa, en consejos de guerra colectivos en los que a veces se juzgaba a docenas de detenidos de diferentes localidades a la vez, con un defensor militar de oficio designado por los mismos verdugos que se limitaba a pedir clemencia al tribunal.
Antes de los traslados a la cárcel de cabeza de partido de Alcázar, numerosos republicanos de cada una de las poblaciones que lo componían (Alcázar, Tomelloso, Socuéllamos, Pedro Muñoz, Argamasilla de Alba, Campo de Criptana, Herencia y Puerto Lápice ) habían sido víctimas de asesinatos extrajudiciales y de todo tipo de palizas y torturas en improvisados centros locales de detención. La cárcel de Alcázar se cerró en 1941, y los detenidos fueron trasladados a la cárcel provincial de Ciudad Real, donde las ejecuciones se prolongaron hasta 1944 (ocho de ellos eran vecinos de Argamasilla) y se reprodujeron las pésimas condiciones y los malos tratos, que costaron la vida y la salud a otros muchos.
A día de doy, todas y cada una de las sentencias y resoluciones judiciales producto de la legislación represiva del franquismo, continúan siendo plenamente legales y firmes. Jamás ninguno de los asesinos, ninguno de los torturadores, ninguno de los beneficiarios políticos y económicos del régimen franquista y de la represión, ha sido juzgado, condenado ni censurado. Las tierras, casas y bienes, el dinero incautado a muchas familias de antifranquistas ni les ha sido devuelto, ni se les ha reparado por el daño causado (por no hablar del miedo y de las humillaciones padecidas). Nunca un representante del Estado, del Ejército, de la Iglesia Católica, ha pedido disculpas a las víctimas de la dictadura, a sus familias, a la sociedad española.
Han pasado 42 años desde la muerte física del dictador y la memoria de los defensores de la democracia y de la libertad aún no ha sido recuperada. Todos ellos y ellas, así como la mayor parte de sus hijos, nos han dejado sin que se les haya hecho justicia. Por eso son tan importantes las memorias de los antifranquistas y un documento tan excepcional como las notas de Vicente Serano: para evitar el olvido planificado y la impunidad que siguen imponiendo los vencedores de la guerra, de la dictadura y de la transición.
Quiero expresar mi consideración y agradecimiento a Vicente, a Petra y Paco, a toda la familia Serrano Zarco, y a José Trujillo, por haber preservado este documento, continuando con el deber de memoria voluntad de su padre, a pesar del riesgo que supuso conservar y esconder las notas de Vicente durante toda la dictadura.
El impagable documento de Vicente Serrano Zarco exige una publicación íntegra y un estudio mucho más amplio, en el contexto de los recientes trabajos sobre la represión franquista en Ciudad Real. A ello nos comprometemos desde estas líneas.
Arturo Peinado Cano, @apces