viernes, 30 de julio de 2010

martes, 27 de julio de 2010

Menasalbas, 71 años después... vídeo de Jlgccv Madrid




Homenaje a los soldados republicanos que hace 71 años, acabada la guerra y a la vuelta del frente, fueron salvajemente torturados y asesinados en el pueblo toledano de Menasalbas, por haber defendido la legalidad democrática frente a la dictadura nacionalsindicalista que acabó imponiendo el militar golpista Francisco Franco con ayuda de Hitler y Mussolini.




http://www.facebook.com/video/video.php?v=1496780949165

http://www.youtube.com/watch?v=gE40e54C0qQ

miércoles, 14 de julio de 2010

Contradicciones cubanas, por Pascual Serrano

Contradicciones cubanas


El País presenta el 8 de junio un amplio reportaje titulado “Las caras de la maternidad”, donde recorre nueve países para contar cómo otras tantas mujeres “relatan cómo se vive la experiencia de dar a luz y criar a un hijo”. El caso cubano lo presenta así:

“Judith Carreño Viera es un ejemplo de las contradicciones que viven las madres en la isla: disfrutan de una atención sanitaria de alto nivel, con vacunas gratuitas y obligatorias, alimentos subvencionados, pero un simple paquete de pañales alcanza precios prohibitivos”

Por supuesto, el diario no hace referencia al bloqueo estadounidense que explicaría el precio de los pañales en una isla que no puede producir todo lo que consume. Lo que el diario llama “ejemplo de contradicciones” y no conquistas o derechos sociales descubrimos cuando pinchamos en el texto y vamos a la noticia que consiste en que la niña del ejemplo, de tres años, “ha sido vacunada contra 13 enfermedades, no ha de pagar nada cuando va al médico y recibe una cuota de arroz, frijoles, azúcar y otros productos racionados a precios subsidiados, como cualquier cubano. También tiene asegurada la leche hasta los siete años a un precio simbólico”. Además, “las madres tienen derecho a un año de licencia por maternidad con una garantía salarial de entre el 70% y el 100%”. Curiosamente la española entrevistada cuenta que “tuvo problemas en su trabajo por pedir una reducción de jornada para poder seguir dando el pecho a su bebé” y debe pagar 280 euros al mes para una guardería. Eso sí, en España no hay “contradicciones”.

http://www.pascualserrano.net/noticias/contradicciones-cubanas

sábado, 10 de julio de 2010

jueves, 8 de julio de 2010

Las políticas fiscales neoliberales, por Vicenç Navarro hoy en Público

Una de las políticas fiscales que han caracterizado el pensamiento neoliberal reproducido en la mayoría de partidos gobernantes en la Unión Europea, tanto de derecha como de centro izquierda, ha sido la reducción de impuestos. Se decía que tal bajada de impuestos liberaba la capacidad creativa, tanto de los ciudadanos como de las empresas, estimulando así la economía. En España, no sólo la derecha –tanto española (PP), como catalana (CiU)– sino también la izquierda gobernante (PSOE), enfatizaron la conveniencia de bajar los impuestos. El presidente Zapatero inició su mandato con el dicho de que “bajar impuestos es de izquierdas”. Antes, los gobiernos del PP habían hecho de esa bajada el elemento central de su política fiscal.

Y un tanto semejante ocurrió en varios países de la UE. En Alemania, por ejemplo, los impuestos sobre el capital se redujeron (desde 1995 a 2009) nada menos que 26 puntos, a la vez que el nivel de gravación fiscal de las rentas superiores se redujo 9,5 puntos. En España y Francia, la reducción de los impuestos de las rentas superiores fue incluso mayor, reduciéndose 13 puntos. En Italia, el Impuesto de Sociedades bajó 20,8 puntos y el de las rentas superiores 6,1 puntos. Tales reducciones favorecieron a las rentas del capital y a las rentas superiores, de manera que tales rentas, como porcentaje de las rentas nacionales, se dispararon, incrementándose las desigualdades de renta de una manera muy acentuada. De esta manera, la regresividad fiscal y las desigualdades sociales aumentaron espectacularmente estos últimos 15 años.

El argumento que se utilizó para promover estas políticas fiscales, favorables a las rentas del capital y a las rentas superiores, era que había que cuidar (mimar, sería la expresión más adecuada) los factores movibles –tales como el capital y las rentas superiores–, evitando que se asustaran y dejaran el país. Este era el discurso neoliberal que sostuvieron los medios de mayor difusión del país. Detrás de él existía el enorme poder político del capital financiero y empresarial (y muy en especial el relacionado con las exportaciones), así como el de las rentas superiores. Donde esta influencia adquirió mayor desarrollo fue en Alemania, cuyo modelo económico estaba, y continúa estando, basado en un modelo financiero y exportador con una competitividad elevada, enraizada en unos salarios estancados que no mejoraban con el crecimiento de la productividad. Ese incremento de la productividad repercutía primordialmente en aumentar los beneficios del capital, muy en especial de las empresas exportadoras y de la banca, y no en aumentar las rentas del trabajo.

Como dijo Peter Bofinger, miembro del Consejo Económico alemán, “el problema de Alemania es que vive muy por debajo de sus posibilidades”, es decir, que la riqueza que se creaba y continúa creándose no repercute sobre el nivel de vida de los trabajadores y de las clases populares alemanas. El Gobierno socialdemócrata del canciller Gerhard Schröeder (1998-2005) fue el que inició –en su programa de 2010– la reducción de los impuestos de sociedades y de las rentas superiores, política seguida más tarde por Angela Merkel y sus gobiernos de coalición.

Algo parecido ha estado ocurriendo en Francia, donde la creciente regresividad fiscal explica un notable crecimiento de las desigualdades sociales. De nuevo fue un Gobierno socialdemócrata, dirigido por Lionel Jospin (1997-2002) el que inició la política de reducción de impuestos, política que fue acentuada por Nicolas Sarkozy en 2007.

Tal reducción de impuestos de las rentas superiores, además de incrementar las desigualdades, creó también las bases para que apareciera el problema del déficit del Estado. Este déficit fue causado, en parte, por la disminución de la actividad económica. Pero las políticas de reducción de impuestos, con la consiguiente reducción de los ingresos al Estado, contribuyeron enormemente a la creación de los déficits y del aumento de la deuda pública. En Alemania, por ejemplo, si los niveles de imposición fiscal fueran los mismos que existían en 1998, el Estado alemán hubiera recaudado 75.000 millones de euros más por año de los que recaudó en 2009, una cantidad semejante, por cierto, al déficit que el Gobierno Merkel quiere resolver mediante los recortes muy acentuados que ha propuesto sobre el Estado del bienestar alemán. Un tanto semejante ocurre en España, donde el déficit del Estado no sería tan elevado si los niveles de imposición, tanto de las rentas del capital como de las rentas superiores, se hubieran mantenido igual a los existentes en los años ochenta.

Estos datos señalan el error del argumento ampliamente utilizado en las instituciones europeas (Consejo Europeo, Comisión Europea y Banco Central Europeo) en defensa de la austeridad del gasto público (incluyendo el gasto público social), indicando erróneamente que “hemos estado viviendo durante todos estos años por encima de nuestras posibilidades”, asumiendo que nos hemos gastado más de lo que tenemos. Pero no es cierto y es fácil de demostrar. Tenemos el gasto público social más bajo de la UE-15, lo cual no se debe a que España no tenga recursos. España tiene ya el nivel de riqueza de la UE-15. Su PIB per cápita es el 94% del promedio de la UE-15. Y, sin embargo, el gasto social es sólo el 73% del promedio de la UE-15. Si nos gastáramos el 94% del promedio tendríamos 66.000 millones de euros más para gastarnos en nuestro escuálido Estado del bienestar. España tiene estos recursos. Lo que ocurre es que el Estado no los recoge.

Y ahí está el problema. No es que vivamos por encima de nuestras posibilidades, lo que pasa es que los ricos, los bancos y los grandes empresarios no pagan lo que debieran. Las políticas neoliberales han favorecido a las rentas superiores, creando una enorme polarización social, que han generado la crisis actual y que están dificultando la recuperación económica. Y ahí está el problema que los medios de persuasión no tocan.

Vicenç Navarro es catedrático de Políticas Públicas de la Universidad Pompeu Fabra y profesor de Public Policy
en The Johns Hopkins University

http://blogs.publico.es/dominiopublico/2126/las-politicas-fiscales-neoliberales/

lunes, 5 de julio de 2010

Europa amenazada con dictaduras militares, por Heinz Dieterich

Viernes, 2 de julio de 2010

Unión Europea amenaza con dictaduras militares

Jose Durao Barroso, ex Primer Ministro de Portugal y actual Presidente de la Comisión Europea ha advertido a los sindicatos y movimientos populares de Europa que si no aceptan los paquetes neoliberales de austeridad, podrían instalarse dictaduras militares en España, Grecia y Portugal.

Barroso, el más alto funcionario del ejecutivo europeo, “nos traumatizó con una visión apocalíptica del colapso de democracias en Europa debido a su situación de endeudamiento”, recuerda John Monks, Secretario General de la Confederación de Sindicatos de Europa (ETUC). Su mensaje “fue tajante: si no se implantan los paquetes de medidas de austeridad, en esos países podría desaparecer la democracia como la conocemos actualmente. No hay otra alternativa.”

La burguesía europea plantea, en otras palabras, un ultimátum al movimiento obrero y popular: paguen sumisamente los costos de la crisis que el gran capital ha causado, o se los hacemos pagar por la vía de la bota militar. En lenguaje político: si ofrecen resistencia a la reducción de su nivel de vida pasaremos de la dictadura burguesa velada (democracia representativa) a la dictadura burguesa abierta.

La amenaza es real por varias razones. En primer lugar, por el status del emisor del mensaje. Barroso es el más alto funcionario del Estado regional europeo y, por lo mismo, el capo di capi visible de su clase política. En segundo lugar, por el status de los receptores del mensaje, la European Trade Union Confederation (ETUC). Finalmente, por el hecho, de que las dictaduras militares desaparecieron apenas hace unos treinta años de estos países. La dictadura falangista en España duró formalmente de 1936 hasta 1978; la última dictadura militar en Grecia (G. Papadopoulos) de 1967 hasta 1975 y la dictadura portuguesa de Salazar sobrevivió de 1932 hasta 1974. Reinstalar el terrorismo de Estado en la periferia sureña de la Unión Europea ---sea en forma abierta como en Grecia en 1967 o en Honduras en el 2010, o en forma encubierta como en Colombia--- para proteger las disfuncionales relaciones de producción capitalistas y los intereses de los poderosos, no será ningún problema en un continente, cuya clase dominante inventó el fascismo, el falangismo y el nacionalsocialismo. Y en cuya cuna de modernidad, Francia, el gobierno (Pompidou-de Gaulle) rodeó el 29 de mayo de 1968 Paris con los tanques del Ejército francés, para romper el paro general de obreros y estudiantes, si fuese necesario.

La amenaza de usar la violencia del Estado contra la resistencia de los pobres se complementa con un reporte de Merrill Lynch-Capgemini que informa que los ricos del mundo se hicieron aún más ricos en la peor crisis capitalista mundial desde la Gran Depresión de los años treinta. El número de millonarios en el mundo subió el año pasado a diez millones (+ 17%), que juntos representan una riqueza total de 39 billones de dólares. De esos plutócratas, 2.87 millones viven en Estados Unidos; 1.65 millones en Japón; 861,000 en Alemania y 477,00 en China.

La lectura de ambas informaciones ---la advertencia de Barroso y el perverso aumento de la riqueza de los plutócratas en tiempos de severa crisis económica mundial--- no deja duda alguna sobre el carácter de clase del capitalismo que vivimos y sus sujetos principales, las grandes burguesías. Si fuera necesario volver a establecer campos de concentración para proteger las ganancias, como en los años treinta, esos sujetos volverían a establecerlas.

Para las mayorías y los intelectuales críticos la lección es igualmente clara. Es preciso emular la actitud del movimiento obrero e intelectual europeo de 1847. Cuando en 1847 quedó evidente que 1848 iba a ser un año de grandes convulsiones sociales y políticas, la vanguardia europea encargó a Marx y Engels redactar un Programa Regional de Acción, que orientara a las mayorías en la defensa de sus legítimos intereses. Ese programa de alternativas estratégicas y medidas tácticas, fue el “Manifiesto Comunista”.

Hoy día conocemos el Modo de Producción del Socialismo del Siglo XXI ---planeación democrática, valor de trabajo y principio de equivalencia--- y su superestructura política (Ueberbau), la democracia participativa. Lo que nos falta, a diferencia de 1847, son sindicatos e intelectuales con conciencia de clase y teoría crítica. Por eso, las mayorías europeas se encuentran sin defensas ante la amenaza “apocalíptica” del terrorismo de Estado burgués que su más alto funcionario acaba de lanzar.

http://www.analitica.com/va/internacionales/opinion/1312748.asp